¿Quién es más violento…?

 

          No saben bien los responsables de las últimas manifestciones, que han acabado en violencias vandálicas, en ocasiones casi mortales, contra policías, y de graves  violencias contra bienes cívicos, el daño que hacen a las nobles causas que dicen defender y proclamar, por no impedir, de todas las maneras posibles, esa barbarie y no condenarla sin reservas de inmediato: el ochenta por ciento, cuando no más, de los españoles acaban detestando tales manifestaciones y a todos sus dirigentes. Sucede, por desgracia, que algunos de éstos todavía llevan en su ADN político, sindical o social la violencia, que llaman de respuesta, como parte de su ideología. Grave error y grave herencia de bárbaros seudoprogresistas. Tales responsables debieran pagar todos los daños ocasionados en cada una de esas razzias. Dicho lo cual, me pregunto al mismo tiempo, sin querer compensar ni suavizar mis juicios anteriores: ¿Quién es más violento contra la sociedad y contra los bienes de la misma, y sobre todo en estos momentos: el parado, el hambriento, el paria de la tierra, que tira piedras contra la fuerza pública o rompe las lunas de un banco, acciones necesariamente punibles, o el banquero, financiero, consejero o logrero, todos ellos impunes, que cobran seis, ocho, diez… millones de euros al año?