Una sociedad enferma (I)

Juan González Anleo, prestigioso sociólogo, a quien sigo hace años, acaba de piublicar en la revista semanal católica Vida Nueva, presente a menudo en este cuaderno, dos pliegos sobre España ¿una sociedad enferma?, que quiero comentar en una serie, no lineal, de glosas breves a lo largo de los próximos días. Que España fuera una sociedad enferma en determiandos momentos de su historia se ha escrito no pocas veces. No sólo, en medio del siglo XVII, como reuerda el historiador Ángel López García-Melis (hundimiento económico, disgregación territorial, pérdida de influencia, retroceso cultura.l..).Tampoco faltan diagnosticdores de la España enferma a mediados del siglo XIX (guerras civiles, empobrecimiento económico, pérdida de América, desamortizaciones, golpes militares…). ¿ Y qué decir de finales del siglo, de la España de la Generación del 98? Cuántos males sobre la España nuevamente enferna (pérdida de las últimas colonias, fracaso de la Restauración, anticlericalismo, corrupción…). Quien conozca los años 1933 y 1934, clave de la Segunda República, no dejará de ver síntomas gravísimos de enfermedad: (fracción de España en dos, violencias personales y colectivas continuas, crisis económica sobre todo en el campo, conflicto en ciernes entre la dictadura fascista y la dictadura socialista…). Otros verán a España presa de enfermdad moral y física en los cuarenta y ciencuenta del pasado siglo (dictadura, hambre, odios, aislamiento internacional…). Otro laureado sociólogo español, Salvador Giner define la sociedad enferma como la interrupción grave de la vida normal de un individuo, grupo o institución, como consecuencia de una situación inesperada o mprevista, lo cual provoca mudanzas radicales en ellos y hasta puede llegar a obliterarlos. El mismo autor ha llegado a escribir que España es una sociedad en descomposiicón moral. ¿Por qué? Por a) falta de educación cívica; b) falta de ley, referencias y valores; c) falta de tensión y de patriotismo.