¿Qué diálogo?

Leyendo sobre esa III Asamblea Ecuménica Europea, de la que ayer hablaba, encuentro unas reflexiones de Benedicto XVI sobre el diálogo, no sé si enviadas o no a la misma Asamblea, que me parecen de extraordinaria finura intelectual. El diálogo: ese lema omnipresente, ese cúralotodo, esa llave que abre todos los enigmas, ese comodín con el que se justifica cualquier mentira, impostura o traición. “Un diálogo auténtico -dice el papa- nace sólo donde no hay únicamente palabra, sino tambien escucha, y a través de la escucha se realiza el encuentro, en el encuentro nace la relación y en la relación tiene lugar la comprensión, entendida como profundización y transformación de nuestro ser cristiano (…). Incluso hace que el mismo Señor hable en medio de nosotros”. Aun sin referencia alguna al ser cristiano, es una de las descripciones de diálogo más verdaderas y completas que conozco.