El factor sorpresa

El superior general de la Compañía de Jesús, Adolfo Nicolas, pronunció en el reciente Sínodo de los Obispos unas palabras sabias, casis enigmáticas, que son a la vez una profunda autocrítica sobre los nuevos intentos de evangelización. Y lo dice nada menos que el jesuita de los jesuitas más en vanguardia en todos los campos: Temo que nosotros, los misioneros, no hemos buscado a Dios en todas las cosas con suficiente profundidad, y por eso no hemos contribuido a la vida de la Iglesia con los descubrimientos que debimos hacer. (…) Ciertamente hemos intentado ser positivos en nuestra visión de otras culturas y tradiciones, pero me temo que lo que hemos visto han sido en su mayoría signos de fe y santidad occidentales. (…) No tuvimos demasiadas ganas de encontrar “el factor sorpresa” en la obra del Espíritu Santo, que hace crecer la semilla aun cuando el sembrador está dormido o el misisonero ausente.