La prostitución servida

Esos diarios y revistas, tan serios como parecen, tan democráticos, tan modernos, o tan moralistas, o tan progresistas…, casi todos ellos, excepto tres o cuatro, ganan muchisimo dinero -unos 15.000 euros al día, de promedio- en la llamada sección de relax, anunciando, publicitando, propagando, vendiendo, justificando, de un modo u otro, la prostitución. Esa nueva forma de esclavitud, de la que apenas hablan en sus páginas más dignas, que degrada a quienes participan en ella, y sobre todo a quienes de una forma más activa y libre la hacen posible. De manera objetiva, plenamente libre y, como suelen decir, racional, los diarios y revistas que anuncian, publicitan, propagan, venden y justifican la prostitución, colaboran con la explotación sexual más vil y atentan de manera continua e interesada contra la dignidad de la mujer, de la que tanto hablan en sus páginas más dignas, y contra el respeto a los lectores en general, no solamente a los niños. Total, que contra lo que dicen a cada paso, y con qué solemnidad, en sus páginas más dignas sobre la integridad, respeto y dignidad del ser humano, pisotean cada día esa dignidad, repeto e integridad, anunciando, publicitando, propagando, vendiendo y justificando… la prostitución.