Confusión y propaganda

Leo las declaraciones del secretario general del PSE, Francisco López, a un diario de Bilbao, y las resumo en confusión y propaganda. Lo mismo alude a los referéndum de autodeterminación en Quebec (qué oportuno, ¿verdad?) que repite la clásica serenata de que “la voluntad de decisión de los vascos” ha de hacerse según la legalidad vigente. Igual declara próximo “el acuerdo histórico” tras cuarenta años de terrorismo que quita importancia a la lentitud de su “proceso de paz”. Eso sí, afirma paladinamente que continúan sus encuentros y conversaciones con la “izquierda abertzale” (izquierda patriótica), a la que hace unos meses el mismo López calificaba como ” Batasuna, brazo político de ETA”, y se muestra decidido partidario de la “mesa de partidos”, fuera del parlamento, que rechazaba contundentemente en tiempos no muy lejanos. Sigue, pues, el callejón sin salida, a no ser que alguien nos abra un boquete en el callejón. En el mismo periódico se da como probable que Batasuna no quiera legalizarse, y forme al fin una coalición electoral o elija de nuevo las siglas del desconocido partido (PCTV) tras el que se presentó en las últimas elecciones autonómicas. Leo asimismo en la prensa independentista que la organización de los presos de ETA plantea como “mínimos” puntos de acuerdo el derecho de autodeterminación, la exigencia de la unidad territorial y la amnistía de todos los “presos políticos vascos”. Mientras Errazti y Madrazo coinciden en su encuentro de hoy en afirmar como punto incontrovertible y decisivo para cualquier avance en su “proceso de paz” el derecho y el ejercicio de la autodeterminación. “Proceso de autodeterminación”, pues, si nos cabía alguna duda, incluso por parte de EA y de IU. Confusión y propaganda. Callejón sin salida.