Una democracia indigenista

Habla José María Ridao en el Ateneo navarro sobre minorías indígenas en América Latina. Ahora que miuchos países hispanoamericanos comienzan a  celebrar el segundo centenario del comienzo de la independencia. Por cierto ¿en la llamada primera colonización no hubo nada bueno? Tras la colonización criolla, algunas minorías están llegado al estadio de la segunda independencia. Con un proyecto arcaico, en expresión de Vargas Llosa, según recuerda Ridao: mirando, más que hacia el futuro, hacia una edad de oro indígena. ¿Les ayudará eso a superar los siglos de apartamiento, injusticia y opresión? No parece que el fundamentalismo indigenista sea suficiente. La democracia plena, uniendo libertad e igualdad, sí. Ninguna discriminación es buena, ni siquiera la indigenista, por muchas razones que parezca tener en su favor, y menos cuando algunos caudillos no indígenas pero sí indigenistas -el comandante Marcos, por ejemplo-, se sirven de ese supuesto para sus fines ulteriores. Preocupante situación de las minorías indígenas e indigenistas en Bolivia, Perú, Guatemala, Ecuador… Y esperanzadora a la vez.