¿Qué libertad religiosa?

La secretaria de Estado, Hillary Clinton, ha presentado el informe anual de su departamento sobre la libertad religiosa en el mundo. Nada menos. El secretario adjunto, Michael Posner, se refirió, en esa misma comparecencia, para lamentarlas, a la prohibición del burka en espacios públicos, aprobada en Francia o Bélgica, y a la prohbición de minaretes en las mezquitas de Suiza. Esto es lo que más les importa, por lo visto, a los responsables de la política exterior de USA. ¡No les importaría tener una secretaria de Estado, presentado el informe y cubierta por el burka! ¿Y qué tendrá que ver el burka con la religión? El informe destaca, además, importantes restricciones en Cuba; casos de acoso e intimidación en Venezuela y violaciones de la libertad religiosa en Irán, China o Birmania… La nula libertad religiosa en un país aliado como Arabia les preocupa menos, y en general en todos los países aliados árabes, como Pakistán, con múltiples ataques a los cristianos. Eso tiene de malo emitir informes sobre libertad (religiosa u otra cualquiera) desde un laboratorio u observatorio político de un Estado; en este caso, el más poderoso del planeta: que todo se tiñe de la política concreta de ese Estado. ¡Menguada libertad!