Perdón en Honduras

Leí, los días pasados, en los periódicos de Honduras los discursos del nuevo presidente elegido, Pepe Lobo Sosa. Sus palabras en la misa de acción de gracias, en la basílica de Suyapa, rodeado de autoridades, antes de su investidura, me recordaron algunas de la actuaciones de los demócratas cristianos italianos de los años sesenta: Por los pobres para que obtengan una mano amiga que ayude a lidiar sus necesidades, oremos al Señor… Por las mujeres abandonadas, para que la Virgen siempre les brinde su amor y compañía… Al final de la misa el nuevo presidente electo recalcó la necesidad del perdón en la nación hondureña, después de tantos avatares: … si queremos paz, tenemos que perdonarnos todos, y es lo que la palabra de Dios nos dice (…) Haremos un gobierno fundamentado en la doctrina social cristana (…) Cada vez que duden de mí, vayan a a la doctrina.-. Que así sea.