¿La nación, el todo?

Escribe el historiador catalán Josep M. Pradera que el gran logro del nacionalismo está en la aceptación y aparente éxito de que lo social e individual es la parte y la nación el todo. Y es que una política eficacista, puramente realista y egoísta, sin cultura humanista que le sirva de fundamentro nutricio, ha conseguido eso en casi todas partes.