Gases fluorocarbonados

La busqué entre lo más visto o lo más leído de los periódicos, pero no lo encontré en ninguno de ellos. Y, sin embargo, entre tantas malas noticias, por ejemplo, el fracaso de la larga cumbre de Madrid, que acaba de terminar, sobre el avance del desierto en muchos países, algún diario recordó ayer los 20 años de la firma del Protocolo de Montreal: el acuerdo por el que 190 paises, convocados por la ONU, se comprometieron a reducir drásticamente las emisiones de gases fluorocarbonados, que dañan la capa de ozono que envuelve a la Tierra. Parecía en un comienzo muy lejano el compromiso, porque una importante rama de la industria solía utilizar esos compuestos. Y, sin embargo, las cosas han ido mucho mejor de lo que se temía y hasta mejor de lo que se esperaba. No ha desparecido, en verdad, el agujero, pero los científicos aseguran que, si seguimos tomándolo en serio, en unas décadas volverá a recuperarse la capa de ozono y se habrán evitado con ello decenas de miles de casos de cáncer de piel.