Strauss-Khan

¿Se habría atrevido la justicia española a detener en España a un pez tan gordo como el director del FMI y llevarle directamente a la cárcel, sin admitir la fianza de un miilón de dólares, ese privilegio de los presuntos delincuentes ricos? A los que les parece bien cualquier castigo para los religiosos pederastas les parece mal el castigo del político francés por un brural asalto sexual e intento de violación de una inmigrante africana camarera de hotel? Esta vez tiene mucha razón Bibiana Aído. Parece mentira que la secretaría general del Partido Socialista Francés, la señora Auvry, hija de Jacques Délors, aparezca tan partidista, tan poco feminista, tan fanática. Lo ha dicho muy bien Eric Zemmour en RTL: La gauche française est formidable. Elle est prête a tout pour défendre l´un des siens (La izquierda francesa es temible. Está dispuesta a todo por defender a uno de los suyos). El narcisismo patriótico o partidista hace estragos. Qué horror el modelo americano de justicia y qué esplendorosa la justicia francesa: por ejemplo con un libertino reincidente como Strauss-Khan, o un disfrutador de menores en Tailandia como el ministro Fréderic Mitterrand. ¿Es que Berlusconi, otro mujeriego y seductor -eufemismos de los ricos y poderosos delincuentes- es más vulnerable y despreciable que el ex ministro socialista francés? Otra prueba más del sectarismo moral y de la sumisión de todos los valores, aun los más altoss, a los intereses particulares del poder, de la fama y del dinero.