¿Nadie defiende a Colón?

 

    En la ciudad de Los Ángeles, por iniciativa de un concejal fanático, han desmontado una estatua de  Cristóbal Cololón, después de ponerle como chupa de dómine, hasta llamarle nada menos que protagonista del mayor genocidio de la historia. No sé si algún hispanista norteamericano, de los muchos y buenos que hay, habrá alzado la voz para poner un poco de cordura. Lo que hasta ahora sé que ninguna autoridad española, política o cultural, lo haya hecho. Ni ministros, ni académicos, ni historiadores. Una cosa es que Colón fuera en su tiempo esclavista, como eran casi todos, hasta  Bartolomé de las Casas en una primera época, y otra que fuera un genocida y protagonista de genocidios. Podría mirar el concejal de marras un poco a su alrededor y los encontraría mucho mayores y mucho más cerca. Avezados a callar, a destiempo, ante la gran leyenda negra y ante muchas pequeñas leyendas negras como aquélla, no hemos aprendido a reaccinar a tiempo. Vamos a ver a quién podemos felicitar en España o fuera de España en los próximos días.