El sabor de Santi Santamaría

Leo unas últimas entrevistas con el maestro de los maestros cocineros españoles, Santi Santamaría, recién fallecido en una de sus últimas creaciones en Singapur. Autodidacta, este catalán, que apenas tuvo tiempo para otra cosa sino para trabajar, era un hombre de múltiples saberes cultivados, y lo mismo hablaba y leía de cocina y gastronomía que de agricultura, arte, ensayo, vida actual o futuro del hombre. Cuando le preguntan en una de esas entrevistas si el cocinero es un artista, responde amplia y sabiamente. He aqui sus últimos párrafos: Si el arte en sí tiene como objetivo que puedas percibir de alguna forma la exaltación de todos los sentidos y encuentres la armonía, también hoy -y en esto está un poco mi conttribución y mis argumentos-, considero que la cocina puede llegar a serlo, pero para mí  no hay arte en el siglo XXI que no tenga una función social. ¿Por qué el cocinero moderno tiene que pasar a ser un bufón? Precisamente hoy, cuando hoy el arte tiene que estar al servicio de una mayor justicia si cabe, proponiendo una conciencia sobre los valores que guardan relación con la alimentación. Si somos tan artistas para satisfacer sólo a bocas pudientes y saciadas, apaga y vámonos.