De aquellos polvos…

 

     Escribe Ignasi Guardans, el nieto de Cambó,  en El Confidencial que esta sentencia por si sola no resuelve absolutamente nada en el complejo entramado político y social catalán; que los partidos políticos que sostienen al Govern y sus líderes no contrrolan la situación; que el independentismo, como movimiento emocional, sale de alguna manera reforzado tras esta condena; y que, en todo caso, el papel del derecho penal ha terminado y que es muy urgente regresemos todos al tiempo de la política antes que sea demasiado tarde. Graves afirmaciones, que conviene harto tener en cuenta.

Más que salir aqui, lo que sería muy justo, agradeciendo la magna lección que nos da la sentencia sobre derecho constitucional, sobre la democracia así como sobre el Estado de derecho, y que los partidos constitucionaistas no supieron adelantar ni en España ni en toda Europa,  no puedo sino recordar en este momento con sonrojo: la política colaboracionista del PSC durante varias legislaturas con partidos independentistas catalanes, responsables de este golpe de Estado, y que le han robado al socialismo catalán el pan y la sal en Cataluña. O que fueron esos mismos delincuentes políticos, con Junqueras al frente, los que, hace dos años, llevaron a la Moncloa al PSOE de Pedro Sánchez o al Pedro Sánchez del PSOE, y que hasta hace tres meses le apoyaron con felón frenesí. Y los 44 ayuntamientos más la Diputación de Barcelona formador por el PSC con partidos separatistas, incluida la CUP.  O la ineptitud de los partidos llamados constitucionalistas que, por preferir su propio interés a la Constitución, hicieron posible que la Generalidad de Cataluña tuviera y tenga hoy la facultad de la Política Penitenciaria y otras bicocas -acción exterior, política lingüística, orden público…-, que hoy nos avergüenzan a todos.

Y lo digo pensando tambien en el futuro de otras Comunidades, como Euskadi, Baleares, Comunidad Valenciana o Comunidad Foral de Navarra.