Matrimonio homosexual

Yo también preferiría tener en España una ley como en Francia, Alemania o Gran Bretaña, donde no se complican con la sagrada o casi sagrada palabra de matrimonio, pero acepto que  la concepción que va imponiéndose hoy día sobre una institución clave en las relaciones entre los seres humanos, prevalezca entre los jueces y probablemente entre la mayoría de nuestra población por encima de un nombre sagrado o casi sagrado y sobre una tradición judeo-cristiana, para muchos de nosotros venerada y venerable. Que lo nuevo y lo verdadero, lo justo y lo respetable coexistan y convivan con la mayor humanidad posible.