Extremismo ateo

-En la tierra de Tomás Moro, Newton y Newman, pero también en la de Hume y Rusell,  el papa filósofo y teólogo Ratzinger, en una visita verdaderamente histórica, ha dejado una huella profunda, según toda la prensa británica, leida en todo el mundo. Y ha llegado hasta el fondo de la cuestión. Sin una fundamentación religiosa queda el mundo al albur del azar y del absurdo. Sin una fundamentación ética queda la vida de la sociedad, y la acción política dentro de ella, a merced de lo que diga y haga cualquier mayoría. Y se ha encarado valientemente al extremismo ateo, que con el nombre de nazismo o comunismo es el autor de las más atroces violencias en nuestro tiempo. Pero hay otro extremismo ateo mucho más cotidiano y sutil, aparentemente  no violento, que algunos hoy día, también en el Reino Unido, cultivan y agitan sin cesar, llevados no por la razón, sino por la intolerancia, la agresividad, el resentimiento y el odio.


Odio camuflado y retenido, el resentimiento es un verdadero veneno social, de efectos devas tadores.

– Todas las curvas femeninas -líneas continuas que varían de dirección paulatinamente- son bellas. Lo mismo las curvas cerradas (elipse o circunferencia) que las abiertas (parábolas, hipérbolas o catenarias).

-Tan virtual (aparente) es ya casi todo, que hasta se organiza cada año un certamen internacional de guitarra sin guitarra (air guitarre).