–Patético es el comilón que se harta de paté.
-Pedí en el restaurante chino, como postre, unos lichis, y me los sirvieron con mango. No sabía que lo tuvieran.
-Es triste ver cómo en muchos casos la ética se reduce a etiqueta y la moral a moralina.
-¿No hay más cera que la que arde? No me extraña, porque la cera que arde se consume muy pronto.