Nada tan vivo como la fe

 

      No sé si algún medio informativo generalista español ha dedicado una línea a la II Conferencia Mundial sobre Religiones, Paz y Concordia, celebrada en Madrid el pasado 6 de noviembre, y organzada por la Fundación Ali Evsen, que busca promover la formación sobre lo que de verdad enseñan las religiones. Saludable propósito, Líderes religiosos cristianos, judíos y musulmanes, alguno de ellos de Oriente Próximo, firmaron una Declaración conjunta para fomentar la educación en valores comunes a todas las confesiones. Del discurso acogedor del ministro español de Justicia, Rafael Catalá, muy inspirado en el teólogo católico ecumenista por excelencia, Hans Küng, quedémonos con este párrafo incitador: La fuerza de las convicciones religiosas tiene que orientarse a la superación de los retos globales de la humanidasd, algo que sólo ocurrirá si las religiones dejan de debatirse en animosidades mutuas, de atizar conflictos y propagar fanatismo, y, si por el contrario, meditan sobre lo que les es común. Y esta glosa en torno a la conveniencia de mantener, como España, relaciones de cooeperación con todas las confesiones de notorio arraigo en el País: Porque frente a los gurús que preveían el fin de las religiones, la realidasd nos demuestra que nada hay tan vivo como la fe.