Carmena en el Vaticano

 

       La alcaldesa de Madrid ha vuelto al Vaticano, este mes de noviembre, donde ya estuvo en julio de 2015, poco después de ser nombrada, como ponente en un congreso sobre la trata de personas y el cambio climático, convocado por la Pontificia Academia de las Ciencias, junto a regidores de gandes ciudades de todo el mundo. En esta ocasión, el congreso trataba un tema similar: la trata de personas y el crimen organizado, en el que todas las ponentes eran mujeres jueces y fiscales. Poco antes de su viaje, la alcaldesa de Madrid, ex juez de profesión, habló de los refugiados ante la Virgen de la Almudena de la catedral madrileña, Patrona de la capital de España, citando palabras del papa Francisco, de quien hace frecuentes elogios. Según Carmena, independiente dentro de PODEMOS, partido gobernante en Madrid, los concejales de este partido apoyan esta relación con la Santa Sede y se sienten extraordinariamente cerca del reconocimiento espiritual que tiene hoy el Papa. En su reciente ponencia, la alcaldesa abogó por la cooperación entre la Justicia y las administraciones nacionales para terminar con el negocio criminal de la explotación sexual, y denunció la hipocresía, que condena socialmente el crimen y permite a la vez los anuncios bien pagados de la prostitución. Como propuesta concreta invitó a erradicar el dinero como papel moneda, empleado, porque no deja huella, para el tráfico de armas. las drogas, la corrupción, el tráfico de personas y la explotación sexual. Manuela Carmena invitó a los Parlamentos a reflexionar sobre el porqué del fracaso de mucha de su legislación aprobada en este campo, e hizo conocer un estudio del CIS, de 2008, según el cual el 31% de los españoles había recurrido alguna vez a la prostitución: lo que confirma una visión machista, que considera a la mujer como una mercancía. Para combatirla, apostó por la educación y por la realización de encuestas periódicas que estudien su evolución social.